Arte: Oscar Bony en el MALBA

Objetos de amor y violencia

En el Malba se presenta una muestra antológica de Oscar Bony, uno de los creadores más prestigiosos y polémicos de la segunda mitad del siglo XX

En el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), a cinco años de su muerte, se presenta la primera muestra antológica de Oscar Bony, un precursor del videoarte, del arte de concepto, de la instalación y de la fotografía de artista.

Desde sus inicios, hacia mediados de la década de los sesenta, Bony se distanció de algunos aspectos de la modernidad aún presentes en las obras de los informalistas, los neofigurativos y los cinéticos: la visualidad y la autonomía estética. En la vía del minimalismo y el arte conceptual, muy temprano resistió cualquier tentación esteticista. Su problema era el que señaló el filósofo norteamericano Nelson Goodman: lo que importa en el arte contemporáneo es el mensaje pragmático. "¿Qué efectos produce el arte?"

No quedan dudas de la incursión temprana de Bony en la vertiente conceptual. La crítica norteamericana Lucy Lippard, en su libro Seis años: la desmaterialización del objeto artístico de 1966 a 1972 (University of California Press), detalló paso a paso la cronología del conceptualismo internacional (había estado en la Argentina en los años sesenta). Entre las primeras propuestas conceptuales consignadas en su trabajo anotó: "Septiembre [1967], Buenos Aires: Oscar Bony muestra una sala vacía, con una grabación en cinta continua, en la que describe las características y las medidas de la habitación hasta el mínimo detalle".

La exposición del Malba, presentada con el título Oscar Bony. El mago. Obras 1965-2001 , se inicia con varios trabajos de la primera época, entre ellos Sinusoide , una estructura primaria de 12 metros, construida en madera, pintada con laca amarilla, que remite a una enorme serpiente que se introduce en el piso para emerger y volver a las profundidades. A su lado está la reconstrucción de Sesenta metros cuadrados y su información (no demasiado feliz en su modo expositivo), que permite conocer una obra de notable carácter conceptual, con la que Bony participó en las Experiencias Visuales 1967 del Instituto Torcuato Di Tella. La propuesta consiste en una superficie del piso cubierta con alambre tejido y en la proyección, sobre una de las paredes, de la imagen filmada del alambre tejido. El viejo proyector de 16 mm está a la vista e integra el conjunto.

Una gran fotografía muestra la polémica obra que Bony presentó, en 1968, en las Experiencias del Instituto Di Tella: La familia obrera , un operativo de explícito contenido político, social y ético. La obra consistía en la exposición "en vivo" de una auténtica familia, integrada por tres personas -padre, madre e hijo-, sentados sobre una tarima. El sentido de la obra se completaba con un pequeño letrero con los datos personales del jefe de la familia: "Luis Ricardo Rodríguez, matricero de profesión, percibe el doble de lo que gana en su oficio por permanecer en exhibición con su mujer y su hijo durante la muestra".

En la muestra se exhiben las diversas series de obras, fundadas en la fotografía, que Bony realizó luego de los años de estada en Italia (1977-1988). Entre ellas, las instalaciones que, en 1993, expuso en Buenos Aires con el título De memoria . Los trabajos están integrados por viejas fotografías del autor (su niñez, su adolescencia, su familia), ampliadas y encerradas en grandes marcos. Cada imagen se encuentra escenificada con objetos reales, similares a los que se ven en la foto: una camisa, una pala, un caballete de madera portátil.

Obras de amor y violencia , de 1994, otra de las series expuestas, es el primer conjunto de obras "baleadas" de Bony (cuadros con vidrios astillados y planchas de plomo perforadas con disparos de armas de puño). Cada pieza tiene adherida al marco la ficha de identificación museográfica con título, fecha y técnica. Como técnica se indica: "disparos de revólver Smith & Wesson 32 sobre blindex". Con esta muestra Bony inició las series de trabajos dedicados a la violencia y a la muerte.

Asimismo se muestran obras de la serie El triunfo de la muerte (el título es una cita de William Blake), expuesta en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires, en agosto de 1998. En estas obras, detrás de los cristales perforados a balazos, aparece el autorretrato fotográfico del artista, indiferente ante la muerte, mientras rueda por las escaleras, salta o grita.

Oscar Bony (Posadas, Misiones, 1941-Buenos Aires, 2002) fue uno de los más importantes artistas emergentes en la segunda mitad de los años sesenta. Durante décadas mantuvo, casi sin pausa, una tensa actitud de rechazo hacia la cultura entendida como mecanismo de adaptación. Siempre entendió el arte como un dispositivo político y ético.

  • adnFILMS. También se presentan los films que, en 1966, Bony exhibió en el Di Tella con el título Fuera de las formas del cine (filmados en 16 mm, blanco y negro, mudo). El conjunto, integrado por El Paseo, El maquillaje (remake) y El submarino amarillo (un cuarto film se extravió), está centrado en cierta indagación sobre el tiempo.


Por Jorge López Anaya
Para LA NACION

Comentarios

Entradas populares